Tras el largo «punto muerto» del Congreso americano, a la situación de la conocida como «Ley del Mercado Justo» aprobada solo por el Senado, y que otorgaba a los Estados la facultad de recaudar impuestos de las ventas online realizadas fuera de sus fronteras, tal y como reclamaba el comercio minorista tradicional.
La propuesta cobra de nuevo auge, con la presentación el pasado 25 de agosto, del borrador de la nueva Ley de Simplificación Tributaria de las ventas online, por parte del Presidente del Comité Judicial, que ha sido acogida con verdadero interés por la Federación Nacional de Minoristas (NRF).
Hasta la fecha y con excepciones, los gobiernos estatales únicamente podían imponer tasas sobre las transacciones realizadas en comercios con presencia física en su territorio, lo cual colocaba en situación de desventaja a los negocios tradicionales.
La nueva propuesta, podría dar por finalizados los esfuerzos de las asociaciones de minoristas, -principales perjudicados por las ventas online-, que en los últimos 15 años han presentado diversas propuestas legislativas, sin éxito, en base a una sentencia del Tribunal Supremo de Estados Unidos del año 1992. El nuevo proyecto considera esta sentencia superada, e incluye avances tecnológicos de control y antifraude que hacen pensar que será aprobada.